15 de enero de 2025
Comentario destacado
Www.homework hotline.com
–Vos mismo me lo dijiste. –Entre el Eufrates y el Tigris -dijo Santiago-; el viejo jardín del Abuelo. -Le dio el último mordiscón a su especial de salame y queso. -Qué asquerosidad es comer después de comer. Durante el tercer año sus dos más cercanos amigos, correligionarios de la hermandad de la yerba, se enteraron porque él les contó, les contó lo que antes sólo sabíamos él y yo. A partir de ese momento fuimos tres los cirineos que le ayudamos a Darío a cargar la cruz de su secreto. No por mucho tiempo es verdad, porque día con día su aspecto a voces lo delataba. Los últimos en enterarse fueron los de mi casa, en el último mes, cuando Darío regresó a morir. Un año antes había muerto papi, quien por lo tanto no lo supo. Y ése era el más inmenso terror entre los terrores y alucinaciones que acometían a mi hermano: que papi lo supiera. No lo supo. La muerte le llegó antes que la noticia. ¡Y papi que iniciaba el día leyendo El Colombiano, el periódico de Medellín, para estar enterado! Así suele suceder. –No te ofendas, Alex -dijo Pete-, pero la verdad, queremos que las cosas sean más democráticas, y no que te lo pases diciendo lo que hay que hacer y lo que no. Pero sin ofenderte. Oís un balbuceo y, sin detenerte a desentrañar lo que significa, cortés la comunicación. Estás furioso. Vas a ajustar cuentas con Brenda cuando la veas. ¿Cómo se le ha ocurrido darle tu número privado a ese médico inepto cuando tu cabeza tendría que estar desenredando las nervaduras de unamadeja sin fin: los pasaportes de Momir, la ejecución del castigo, y la delicada cirugía de introducir el fenobarbital otra vez en los cartones de jugo sin dejar la menor huella? –Yo tengo que pensar en ustedes dos, que han sido para mí como un padre y una madre. ¿Sería justo o equitativo que me fuese y los dejase a merced de las dulces atenciones de este joven monstruo, que nunca fue un verdadero hijo? Ahora está llorando, pero eso no es más que maña y trampa. Que se vaya y busque un cuarto por ahí. Que comprenda sus errores, y que un mal muchacho como él no merece una mamá y un papá como los que tuvo. –La policía -dije-, la horrible e inmunda policía. -Otra víctima -dijo elveco, medio suspirando-. Hermanos míos, todo eso no me gustaba absolutamente nada. Desayuno en unmesto, pensé, pues todavía no había comido en la mañana, ya que todos losvecos habían tenido tantas ganas detolchocarme mostrándome el camino de la libertad. Sólo habíapiteado unachascha dechai. Esastaja se alzaba en un sector muy tétrico de la ciudad, pero por todas partes habíamalencos cafés para obreros, y pronto descubrí uno, hermanos míos. Era muycaloso yvonoso, con una lamparilla en el techo y la suciedad de las moscas como oscureciendo la luz, y algunosrabotadores tempranos que sorbíanchai y devoraban unas salchichas repulsivas, atragantándose con trozos deklebo, trag trag trag, y luegocrichando más. Los servía unadébochca muycalosa, pero que tenía unosgrudos muybolches, y algunos de losvecos que estaban allí comiendo trataban de tocarla, y hacían ja ja ja y ella respondía je je je, y el espectáculo me dio náuseas, hermanos. Pero pedí unas tostadas y jalea ychai, todo muy cortésmente y con migolosa de caballero, y me senté en un rincón oscuro a comer ypitear. –Lo leía en un banco de la Plaza Irlanda. Otras tres cuadras, sin mirarlo. Como si no tuviera pies y manos la retrápoda para írselo ella misma a traer: dos pies con de a cinco dedos y dos manos con de a otros tantos. Dedos si tenía y en las cantidades estatuidas desde el Paleozoico por nuestra sabía madre la naturaleza. Lo que le faltaba era un tornillo en la cabeza. ¡El infaltable tornillo Rendón! Y digo infaltable como quien dice sol oscuro, por oximoron, pues no es que lo tengan sino que carecen de él. Por eso los Rendones no pueden subir ni bajar escaleras. En cambio si toman café. Ahora la ha puesto de espaldas. Avanza las imágenes a voluntad, despacio, una por una, tratando de adivinar qué hay más allá del cuerpo, qué espacios del alma se abren al otro lado de estos bordes físicos que no puede traspasar, cuáles de sus recuerdos, aflicciones y felicidades se ocultan al escrutinio de la cámara. Se detiene en este lunar de la pierna y en la casi invisible mancha rosada que se extiende al centro de la espalda, junto a la espina dorsal, y luego va más rápido, se abre paso hacia las nalgas, se mueve con tanta ansiedad que los muslos de la mujer, cuando ella se despereza, parece que estuvieran temblando. El efecto de aceleración de la imagen es sin embargo imperfecto, la irrealidad se despierta en él como el aleteo de un pájaro inoportuno y, aunque extiende las manos para tocar a la mujer, sabe que ella no está ahí, que su cuerpo es sólo un dibujo de la luz sin olor ni sabor, y que alguna vez tendrá que contarle todo lo que ha hecho con esas imágenes y todo lo que esas imágenes le han hecho. Papi, la finquita que tuviste en compañía con el doctor Espinosa yendo hacía Caldas y que sembraste de hortensias, esas flores de corimbos terminales y corolas azuladas que eran tan tristes que no servían ni pa flores de cementerio y nadie te las compraba, ¿cómo era que se llamaba, si te acordás? ¡Claro que se acordaba! Yo soy el que no me acuerdo ahora, y no hay forma de que él vuelva a contestar. Tampoco le compré la moto. ¿Me pueden ver a mí, con esta dignidad, con estos años, abrazado a él de "parrillero" en una moto envenenada, todos vendados? No, que ni lo soñara. "Así que me va apagando ese radio, señor taxista, que hoy no ando pa discusiones". Y santo remedio, lo apagaban. Algo oían en mi tono de perentorio, la voz de Thánatos, que les quitaba toda gana de disentir: o lo apagaban o lo apagaban. ¡Qué delicia viajar entre el ruido en el silencio! El suave ruido de afuera entraba por una ventanilla del taxi y salía por la otra purificado de agresiones personales, como filtrado por el silencio de adentro. –A éste, al actual, boba, a Wojtyla, alias Juan Pablo II, de solideo blanco y culo negro como su alma. si nos revuelven nos coloreamos..

Lou Nicholes
Presentando Family Times: Lou Nicholes

¿Por qué no te comprometes a tener devociones diarias con nosotros todos los días de este año? Regístrate al final de la página para recibirlas en tu correo electrónico todos los días. ¡Deja que Dios haga algo especial en tu vida! 

¿QUÉ SACÓ DE TU TIEMPO DE SILENCIO HOY?

Esta es una pregunta que Jack Wyrtzen me hizo en una conversación telefónica hace muchos años. Me gustaría hacerte la misma pregunta. Me quedé sin palabras porque no tenía un plan para leer la Palabra de Dios todos los días y compartirla. Como resultado, esta pregunta cambió el curso de mi vida al leer la Palabra de Dios y compartir mis pensamientos con mi familia y otras personas todos los días. Si deseas recibir estos pensamientos, solo haz clic en el botón a continuación y es gratis .

  • Te llegará por correo electrónico diariamente o una vez a la semana, según elijas.
  • Le llevará a través de la Biblia en 6 años, frase por frase o tema por tema.
  • Llega a ti en pequeños fragmentos de unos pocos versículos cada día.
  • Podrás elegir cualquier versión de la Biblia que quieras leer con un solo clic.
  • Después de leerlo puedes escribir tus pensamientos y aplicaciones si así lo deseas.
  • Luego puedes hacer clic en mi comentario que incluye una explicación sencilla del contenido, una ilustración práctica y una aplicación personal.
  • Hay una página de oración y alabanza de los misioneros que cambia semanalmente.
  • Hay un versículo para memorizar semanalmente que corresponde con lo que estás leyendo.
  • Hay un lugar donde puedes escribir tus pensamientos o hacer preguntas diariamente.

Somos una familia misionera que ha ministrado con Word of Life Fellowship desde 1962. Esta es una organización internacional de jóvenes fundada por Jack Wyrtzen, con sede en Schroon Lake, Nueva York. Lou Nicholes creció en una pequeña granja en el sureste de Ohio.

Continuar